viernes, 17 de septiembre de 2010

La eterna carrera de la liebre y la tortuga


El lunes 23 de agosto de 2010, la periodista Graciela Melgarejo publicó en la sección Línea directa, del diario La Nación, de Buenos Aires,  la siguiente columna a propósito de los usos de ciertas palabras adaptadas del inglés, de acuerdo con el punto de vista de un traductor público. La columna fue comentda por algunos lectores, cuyas comentarios se ponen a continuación.

Academia propone, ¿y el hablante dispone?

El mundo está cambiando demasiado rápido, independientemente de las buenas intenciones de todos, incluidos los periodistas y las academias de la lengua. El correo electrónico del lector Mariano Vitetta, traductor público de inglés, está relacionado con esta situación.

Escribe Vitetta: "En una columna de opinión titulada «El sueño de mi vida: ser un bloggero K », del 13 del actual, es llamativo que el escrito se titule de esa manera y, luego, en el cuerpo de la nota se utilice el sustantivo blogger (con su plural bloggers ) para denominar a aquellas personas que se dedican a escribir en el medio de Internet que actualmente se conoce como blog (a pesar del esfuerzo poco exitoso de la Real Academia Española por utilizar la denominación de bitácora , ciberdiario o ciberbitácora para este nuevo medio de difusión de escritos)".

Continúa, implacable, el lector: "Es llamativo también que se utilicen dos voces con una grafía ajena a la lengua española: blogger (extranjerismo crudo o xenismo) y bloggero (préstamo mal formado). Surge a las claras que la voz que mejor se adapta al genio de la lengua española es bloguero , que se presta perfectamente bien para la formación del femenino ( bloguera ) y del plural ( blogueros y blogueras) . El dígrafo gg es inexistente en español, por lo que la voz bloggero puede inducir a error a quien no conozca las reglas de pronunciación del inglés, y, si de lo que se trata es de comunicar en la lengua de Cervantes, lo mejor es adaptar las voces extranjeras que se nos cuelan constantemente, a fin de que entienda la mayor cantidad de personas con el menor esfuerzo".

La conocida denominación lingüística de "lenguas en contacto" está demostrando ser insuficiente para abarcar nuevas realidades; quizá convendría acuñar algo más descriptivo, como "lenguas en movimiento". Porque la invasión de palabras nuevas tomadas (mal tomadas, a veces, como puntualiza Vitetta) del inglés, por exclusivas razones de necesidad, muestran que la Real Academia Española no llega muchas veces a tiempo para contemplarlas ni los lectores están tampoco muy dispuestos a seguir a la RAE en su normativa, cuando sugiere la palabra más adecuada para utilizar ante, por ejemplo, la existencia de los blogs y los blogueros , aceptando también que la elección de la palabra bitácora no haya tenido éxito, porque hay que empezar por explicar a muchos qué es una bitácora (sin embargo, hay varios blogs en Internet que llevan como nombre "Cuaderno de bitácora"). Los más de treinta blogs de este diario (por cierto, todos muy recomendables) certifican que ésa es la palabra que LA NACION eligió para identificarlos. Y, como lo hace notar también el lector en otro párrafo de su e-mail , en varias notas se ha elegido finalmente la palabra bloguero, ra , para los que escriben blogs .

En el Manual de la Nueva gramática de la lengua española (Espasa, 2010), en el prólogo, los académicos aclaran su propósito y expresan un deseo: " La Nueva gramática académica y este Manual que la resume quieren contribuir a que los hispanohablantes reflexionen sobre su propia lengua, tomen conciencia de sus posibilidades expresivas, de las estructuras lingüísticas que las caracterizan y de la enorme riqueza patrimonial que suponen su unidad y su variedad. La Nueva gramática pretende ayudar, asimismo, a que los hablantes conserven este patrimonio, amplíen su dominio del idioma, y ensanchen con ello su propia cultura y su formación integral".

Por supuesto, encaminar a un universo de 450 millones de hablantes del español no es fácil. Tampoco es fácil, para un hablante nativo común, saber todas las normas lingüísticas. La RAE es avisada, por eso también incluye en el prólogo esta cita: "Decía un ilustre gramático, Rodolfo Lenz, que " la Gramática que se necesita para hablar es tan inconsciente, tan ignorada del que la aplica, como la lógica de Aristóteles o de santo Tomás puede ser ignorada de cualquier mortal que habla y piensa lógicamente".

Comentarios

Tehuelchen
23.08.10 - 13:33

Creo que entre la inserción de la tecnología, sobre todo en computación nos lleva a modernizar el lenguaje, pero, en mi idea que esté íntimamente relacionado, como giros, blogear, clickear, etc. y no como snobismo, porque queda "biam". Hay una diferencia entre lo práctico, lo rápido el entenderse a mayor velocidad, que aquellos a los que les gusta tener giros "originales", mechando el inglés o el francés y con palabrejas de poco sustento. El capitalino es muy proclive al snobismo, por ej. Alucinante, fashion, obvio, nada. Hay anteriore y vendrán otros, de diferente tenor, pero al mismo efecto, aparentar una realidad que no existe, o sea el sofisticamiento el que gracias a periodistas originales creen que sofisticado tiene que ver con alta tecnología, es decir al revés total, o evento que pasó a ser algo que se programa, cuando viene de eventual, que no se puede prever. Una lastima, que lastimemos al idioma.

labrava4
23.08.10 - 20:23

El señor Vitetta puede dormir tranquilo. Blogger y Bloggero decantarán como decantó football que yo me acuerdo haberlo visto escrito en inglés entre comillas en los diarios de Buenos Aires, cuando yo era chico por que nadie aceptaba llamar ese deporte balonpié. La academia aceptará la grafía que el pueblo imponga. Los diarios y las revista probablemente usarán una grafía hispana, no créo que la doble G se imponga. De paso BLOG es un neologismo que significa Web Log. Tratar de imponer la palabra bitácora era una causa perdida desde el principio. Nadie sabe lo que es una bitácora, salvo los navegantes y como palabra es muy larga.

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