miércoles, 28 de noviembre de 2018

Nuevos tiempos corren en México (y también tres consejeros del Fondo de Cultura Económica)


En pocos días asume en el Fondo de Cultura Económica como nuevo director Paco Ignacio Taibo II. En paralelo, el pasado 15 de noviembre, Virgina Batista publicó en Excelsior, de México, la siguiente nota, cuya bajada dice: “En el marco del cambio de gobierno, tres intelectuales dejaron la Junta Directiva del sello paraestatal”. 

Renuncian al Fondo de Cultura Económica 
tres consejeros

Con la idea de detallar al gobierno federal entrante la riqueza patrimonial del Fondo de Cultura Económica, “la gran editorial del Estado”, para que no sólo preserve su catálogo, sino que lo enriquezca, el director José Carreño Carlón rindió a la Junta Directiva un informe global de los cinco años y diez meses que lleva su administración. “Eso que al concluir un proyecto llaman pliegues de mortaja, con la idea de que sus huellas resulten de utilidad para el análisis de este órgano de gobierno”.

Con la reiterada mención de la palabra “defensa” del sello paraestatal y franqueada por la renuncia de los tres miembros independientes de la Junta —Fernando Escalante Gonzalbo, Juliana González y José Woldenberg—, así como del propio Carreño, quien fue refrendado como director el pasado 15 de enero para otros cinco años, la reunión de más de dos horas reportó los resultados hasta el tercer semestre de 2018, que concluyó en septiembre pasado.

El funcionario hizo énfasis, “ante un cambio de administración como el que se avecina”, en una visión cualitativa, más allá de los números. “En estos seis años, el Fondo no sólo conservó su patrimonio más valioso: su catálogo, su legado más que octogenario de autores y títulos, sino que incluso rescatamos títulos y autores perdidos en el curso de otras administraciones”.

Aclaró que este catálogo del libro académico y literario se ha preservado y acrecentado a través de 14 cambios sexenales. “No faltaron grandes crisis políticas y económicas, rupturas de los grupos gobernantes, alternancias y sustitución de paradigmas, episodios a los que sobrevivió el Fondo”.

Carreño, quien dirige el FCE desde el 15 de enero de 2013, destacó que en los 84 años de vida de esta dependencia ha subsistido lo medular de las políticas editoriales que mantienen su catálogo como el principal activo de la casa. Y señaló que éste posee un valor simbólico, en tanto que custodia las obras de los grandes autores nacionales y universales; y un valor económico que rebasaría los mil millones de pesos, “con sus autores y traductores, sus contratos y sus ventas anuales, más el valor de su sello como marca de enorme prestigio nacional e internacional”.

También especificó que el catálogo que entregan a la nueva gestión es “una suma de clásicos y de vanguardias y, a la vez, un retrato de la vida intelectual de México e Iberoamérica”, y advirtió sobre una situación crítica que debe enfrentar la nueva administración: el presupuesto de recursos fiscales notificado este 7 de noviembre considera 129.7 millones de pesos para el Fondo en 2019, cifra menor en 27.2 millones de pesos a la asignación original de 2018.

Este último informe pareció responder a los comentarios que ha hecho públicos el escritor Paco Ignacio Taibo II, nombrado por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador como el futuro titular del Fondo, acerca de que buscará integrar en un solo organismo las tareas editoriales y de fomento a la lectura que realiza este sello dependiente de la Secretaría de Educación Pública y la Dirección General de Publicaciones de la Secretaría de Cultura.

Entrevistados al finalizar el acto, ni Fernando Escalante ni José Carreño admitieron que su renuncia fuera motivada por los cambios que planea Taibo II y aclararon que sólo es el fin de un ciclo.

En una carta firmada por los tres intelectuales que renunciaron a la Junta Directiva se apuntó que el catálogo, el sello y el prestigio del FCE es patrimonio mexicano. “Y tenemos todos la obligación de conservarlo, fortalecerlo y expandirlo. Hay otras muchas tareas educativas y culturales que son responsabilidad del estado, importantes todas, pero el Fondo de Cultura no podría hacerse cargo de ellas sin desnaturalizarse”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario