El artículo publicado ayer en el diario Clarín –y reproducido en la entrada de este blog correspondiente al 11 de abril– tuvo su continuación en una noticia generada esa misma jornada. El empresario kirchnerista Aurelio Narvaja (en la foto, hablando en el foro de Carta Abierta, en la Biblioteca Nacional), dueño de Colihue, la editorial que acumuló 18 millones de pesos argentinos (unos 3 millones y medio de dólares, al cambio oficial) gracias a las compras efectuadas por el Ministerio de Educación, discutió airadamente con quien intentaba entrevistarlo a ese respecto. La crónica que se reproduce a continuación, en perfecto castellano, acaso importe a este blog por el número de traducciones que la editorial contrata, sobre todo para su excelente colección de clásicos.
“Me chupan la p...”,
insultó a Clarín el editor de Colihue
“Me chupan la p...”. Así terminó el diálogo telefónico entre el dueño de la editorial Colihue, Aurelio Narvaja, y Clarín. El propietario de la editorial argentina más favorecida por las compras del Estado se quejó con insultos ante la posibilidad de que se vinculara su pertenencia a Carta Abierta con los más de 18 millones de pesos que recibirá por la venta de casi 800 mil libros. “Puede poner eso: dice Narvaja que le chupan la p... los que dicen eso. Es un buen titular”, repitió antes de colgar. El editor se mostró siempre agresivo y adujo que este diario no buscaba informar honestamente.
“Ustedes por el diario de mierda en el que están lo que quieren hacer es un escandalete del tipo de la politicaonline”, reclamó. Narvaja defendió sus ventas y señaló que en comparación con editoriales más chicas el estado le compró poco. “Hay otras compras sorprendentes”, señaló Narvaja. El editor describió a los trabajadores de su editorial como “laburantes de la p... madre”. “¿Vaya y pregúntele a las otras: ¿qué m... es lo que venden?”, señaló en alusión a otras editoriales que participaron de la licitación oficial. “El ministerio quiso poner la lupa sobre editoriales nacionales”, se defendió y agregó: “Toda la vida tuve un compromiso político y empresario”. Entonces, propuso su sugerente titular.
Sin embargo, esta no es la primera vez que el empresario e integrante de Carta Abierta se hace un lugar en los medios debido a sus excesos y modales.
Psicólogo y con pasado militante en Montoneros y el PRT, a partir de la década del 80 Narvaja se transformó en un hábil empresario editorial. De hecho, según fuentes del mercado, además de Colihue, el intelectual es dueño de una imprenta (ABRN) y de la cadena de librerías Antígona.
Justamente, las librerías están bajo la denominación de Sol SRL. “Sol” es una de las editoriales (que sería propiedad de su hijo) beneficiadas por la compra del Gobierno para distribuir libros en todas las escuelas del país. Lo curioso es que una de las sucursales de Antígona funciona en la misma Biblioteca Nacional, que dirige Horacio González.
Quizá su momento más comprometedor lo vivió en 2009 cuando en Colihue estalló un conflicto salarial porque la editorial no quería otorgar un aumento acordado con el Sindicato de Comercio.
La disputa derivó en 14 despidos por lo que en enero de 2010 los trabajadores decidieron tomar la editorial hasta que el conflicto se solucione. Narvaja, lejos de inmutarse, redobló la apuesta: cerró las puertas con llave y pasó la noche con ellos.
"Había muchos robos de libros. Primero despedimos a un insolente y luego a una vaga insigne y cara de culo", le dijo al diarioLa Nación. "Todo esto me afecta porque soy progre y mis lectores son progre", agregó.
Según denunciaron los trabajadores, en su acampe, Narvaja se paseó en calzoncillos por la editorial, incluso delante de mujeres. Además, su hijo fue acusado de morder el brazo de uno de los empleados.
El empresario se defendió a través de una carta en la que llamó “ridícula enfermera troskosaurica” a la dirigente del MST Vilma Ripoll y acusó a los trabajadores de iniciar “un proceso desmesurado, sin motivos que lo justificaran”.
“Fui empujado, golpeado y herido a la mañana. Estuve obligado a quedarme en el local junto a mi hijo y los siete usurpadores con la ropa que tenía y que en una noche de calor intenso me levanté, sí, a orinar en calzoncillos al baño que está en los fondos del local, lejos de la vista del policía que se encontraba en el hall de entrada y de la única ocupante mujer, que se encontraba inmediatamente después”, se defendió.
Narvaja también entró en 2011en una polémica con el premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa. El peruano abrióla Feria del Libro pero Narvaja y el resto de Carta Abierta se opusieron.
“Es un grave error, porque el extraordinario escritor y muy merecido Nobel, Mario Vargas Llosa, es desde hace años, sobre todo, un propagandista, ostensible y florido, de las ideas y las políticas de la derecha liberal y, como tal, ha dicho las peores cosas de nuestro gobierno, de los gobiernos de América Latina con quienes integramos el Mercosur y la gran mayoría de los de Unasur, y en forma personal dela Dra. Cristina Fernández de Kirchner, Presidenta de la Nación , y del ex Presidente Dr. Néstor Carlos Kirchner”, dijo el intelectual kirchnerista.
A modo de complemento, también se reproduce un artículo publicado en el sitio lapoliticaonline, dirigido por Ignacio Fidanza, donde se traza un perfil del empresario. Según se lee en la bajada, "El dueño de Colihue, que insultó a LPO luego de que saliera a la luz la millonaria compra de libros a su editorial por parte del Estado, también es conocido por sus excesos. En 2010 encerró a sus empleados en medio de una protesta y reconoció que echó a una trabajadora por tener “cara de culo”. Su polémica con Vargas Llosa."
Narvaja, el intelectual K que apela a la "pija"
y ama pasear desnudo por su editorial
“Que me chupen la pija”, espetó el dueño de la editorial Colihue, Aurelio Benito Ramón Narvaja, a un periodista del diario Clarín cuando lo consultó sobre la millonaria compra de libros por parte del Estado a su empresa que La Política Online reveló en exclusiva la semana pasada.
Sin embargo, esta no es la primera vez que el empresario e integrante de Carta Abierta se hace un lugar en los medios debido a sus excesos y modales.
Psicólogo y con pasado militante en Montoneros y el PRT, a partir de la década del 80 Narvaja se transformó en un hábil empresario editorial. De hecho, según fuentes del mercado, además de Colihue, el intelectual es dueño de una imprenta (ABRN) y de la cadena de librerías Antígona.
Justamente, las librerías están bajo la denominación de Sol SRL. “Sol” es una de las editoriales (que sería propiedad de su hijo) beneficiadas por la compra del Gobierno para distribuir libros en todas las escuelas del país. Lo curioso es que una de las sucursales de Antígona funciona en la misma Biblioteca Nacional, que dirige Horacio González.
Quizá su momento más comprometedor lo vivió en 2009 cuando en Colihue estalló un conflicto salarial porque la editorial no quería otorgar un aumento acordado con el Sindicato de Comercio.
La disputa derivó en 14 despidos por lo que en enero de 2010 los trabajadores decidieron tomar la editorial hasta que el conflicto se solucione. Narvaja, lejos de inmutarse, redobló la apuesta: cerró las puertas con llave y pasó la noche con ellos.
"Había muchos robos de libros. Primero despedimos a un insolente y luego a una vaga insigne y cara de culo", le dijo al diario
Según denunciaron los trabajadores, en su acampe, Narvaja se paseó en calzoncillos por la editorial, incluso delante de mujeres. Además, su hijo fue acusado de morder el brazo de uno de los empleados.
El empresario se defendió a través de una carta en la que llamó “ridícula enfermera troskosaurica” a la dirigente del MST Vilma Ripoll y acusó a los trabajadores de iniciar “un proceso desmesurado, sin motivos que lo justificaran”.
“Fui empujado, golpeado y herido a la mañana. Estuve obligado a quedarme en el local junto a mi hijo y los siete usurpadores con la ropa que tenía y que en una noche de calor intenso me levanté, sí, a orinar en calzoncillos al baño que está en los fondos del local, lejos de la vista del policía que se encontraba en el hall de entrada y de la única ocupante mujer, que se encontraba inmediatamente después”, se defendió.
Narvaja también entró en 2011en una polémica con el premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa. El peruano abrió
“Es un grave error, porque el extraordinario escritor y muy merecido Nobel, Mario Vargas Llosa, es desde hace años, sobre todo, un propagandista, ostensible y florido, de las ideas y las políticas de la derecha liberal y, como tal, ha dicho las peores cosas de nuestro gobierno, de los gobiernos de América Latina con quienes integramos el Mercosur y la gran mayoría de los de Unasur, y en forma personal de
No hay comentarios:
Publicar un comentario