Viaje a la ciudad de la lectura
No hubo verano. Lo dice Magdalena Faillace, la presidenta del Comité que prepara la participación del país en esa “vidriera irrespetuosa” que es Frankfurt. Junto a su equipo, se quedó sin vacaciones. Pero la próxima semana se viene la lluvia, el viento y el frío en la Feria del Libro de Leipzig, la segunda en importancia en Alemania, un encuentro de editores alemanes y lectores que, cuenta Faillace, “es muy parecida a la nuestra, donde hay una voracidad por el libro y la lectura”. La delegación argentina, integrada por Tununa Mercado, Carlos Gamerro, Félix Bruzzone, Pablo Ramos y Laura Alcoba, viajará a Leipzig, ciudad de gran tradición musical, la cuna de Bach y Mendelsohn, para participar de lecturas, conferencias y debates. “Elegimos a los escritores teniendo en cuenta la temática de sus obras, vinculadas con la problemática de la memoria, el exilio y la dictadura militar”, subraya la presidenta del Cofra.
El país contará con un stand propio en la Feria del Libro de Leipzig, que se inaugura el próximo miércoles 17, y llevará un catálogo trilingüe (español-alemán-inglés) del Programa “Sur”, que ha desembolzado 480 mil dólares para subsidiar la traducción de autores argentinos. A un año del lanzamiento de esta ambiciosa propuesta se han traducido 146 obras de 123 escritores argentinos a 21 idiomas. “Leipzig se convierte en una ciudad increíble. Pese a la lluvia, el frío y el viento, todo el mundo lee de las cinco de la tarde en adelante; se lee en todos los espacios públicos, cines, confiterías, teatros, escuelas”, revela Faillace, que estuvo en esa Feria, para sondearla, el año pasado. “Los alemanes leen muchísimo y piden lecturas. La lectura en voz alta mueve las emociones”, agrega la presidenta del Cofra. Gamerro y Mercado intercambiarán opiniones sobre “la ficción como interrogante del presente”; en el tradicional Café Rico, una suerte de Tortoni a la germana, el poeta Sergio Raimondi presentará la antología Nueva Poesía Argentina, publicada por estos pagos por la editorial de Viggo Mortensen; leerán sus textos Bruzzone, Alcoba y Ramos; Gamerro anticipa un cross a la mandíbula de los alemanes con su conferencia “Nadie sabía, desaparecedores y testigos mudos”; también habrá lecturas de poemas de Borges y de textos de Norah Lange.
El cuarteto de Luis Stazzo dará un recital y al final habrá milonga para que se mueva hasta el más patadura, por ejemplo Juergen Boos, esa mole de metro noventa, o más, que preside la Feria del Libro de Frankfurt. Faillace cuenta que le preguntó a Boos: “¿Ustedes siempre son tan serios?”. Parece que la respuesta fue: “No, después de que nos tomamos tres cervezas nos soltamos”. Así que la receta para que baile es clara. La ajetreada intervención del país en Leipzig terminará el domingo 21. Por “decreto” de Faillace, la delegación tendrá asueto el lunes. Pero el martes 23 ya estarán en Berlín para participar de la inauguración del festival Lettrétage. Al día siguiente, el martes, llegará el plato fuerte. A 34 años del golpe, se realizará una mesa de lectura y debate en torno de la representación del horror de la dictadura argentina, a través de los recursos de la ficción y la memoria del testigo, titulada “Los hijos de la memoria”.
La agenda de compromisos previos a la Feria de Frankfurt del país invitado de honor incluye la organización de un simposio, que se llevará a cabo a mediados de mayo en Bruselas, cuyo vértice será la memoria del pasado reciente, y el lugar de la Argentina y de Latinoamérica en el nuevo orden mundial. Además de los sociólogos e intelectuales que serán invitados, Faillace anticipa que tiene previsto llevar un largometraje sobre Cortázar y la política. En junio habrá un tercer viaje, ahora a Frankfurt, para presentar el Pabellón argentino digitalizado en una conferencia de prensa. “Ya estamos trabajando a toda máquina”, desliza Faillace, quien comenta que se reunió con Alejandro Vaccaro, el presidente de la Sociedad Argentina de Escritores (SADE) por los “tesoros” que se encontraron en el sótano del edificio de la calle Uruguay: más de dos mil documentos, cartas y manuscritos de Sarmiento, Lugones y Echeverría, entre otros. La idea es hacer una selección de ese material para exponerlo en vitrinas en Frankfurt. “A nosotros nos atrae, cuando vamos a Alemania, ver un manuscrito de Marx o de Goethe, y a ellos también les atraen los manuscritos de nuestros escritores”, plantea la presidenta del Cofra.
“Es uno de los episodios que menos deseo afrontar”, confiesa Faillace cuando se le pregunta por los autores argentinos que viajarán a Frankfurt. “Lo estamos dilatando; con honestidad, no tenemos el listado todavía. Pero hay escritores incuestionables como Juan Gelman, Osvaldo Bayer, Ricardo Piglia, César Aira, Diana Bellessi, Alan Pauls, Martín Kohan, Luisa Valenzuela... Queremos que haya de todas las generaciones, que no sean sólo escritores jóvenes o consagrados. Hay escritores que inexorablemente deberían estar, como Abelardo Castillo, pero no viaja en avión.” El número dependerá de las partidas que le asignen al Cofra. Por ahora se calcula que serán entre 40 y 45 escritores. “Pero no sólo narradores, queremos llevar también a ensayistas”, aclara Faillace.
Es una verdadera política de Estado.
ResponderEliminarNo es ni pretende ser un chistem pero una lectora de España acaba de mandar por mail la referencia que se publica a continuación, preguntándome si la traductora que figura al final es la misma persona a la que hace referencia esta entrada:
ResponderEliminarCómo disfrutar de la vida y del trabajo / Dale Carnegie ; traducción de Miguel Hernani, Román A. Jimenez y Magdalena Faillace.
Other Titles: How to win friends and influence people. Selections. Spanish
Author: Carnegie, Dale, 1888-1955.
Edition: Ed. revisada.
Publisher: México, D.F. : Buenos Aires : Hermes ; Sudamericana, 1987.
ISBN: 9684460805
Description: 201 p. ; 21 cm.
¿Dendeveras habrá dicho que en Alemania la gente lee en los cines? Bueh, supongo que se habrá querido referir al subtitulado de las películas; de lo contario, mimagino que los alemanes tendrán visión de rayos X, como Superman.
ResponderEliminarMiguel, nunca pongas en duda la capacidad de los alemanes para hacer cosas que el resto de la humanidad no puede. Si la señora Faillace dice que pueden leer en los cines, seguro que pueden.
ResponderEliminarNo, si yo no pongo en duda nada. Además, en vista de la calidá de las películas que suelen darse y verse por ahí, nada mejor que un buen libro. De paso, donde dije "de lo contario" quise decir "desembolzado". O algo así.
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