El siguiente artículo –enésimo sobre el tema– se publicó en InfoBAE Cultura el pasado 28 de mayo. En él, el cavernícola Santiago Muñoz Machado, de la RAE, despotricó una vez más contra las formas inclusivas del lenguaje, señalando que "el lenguaje inclusivo afea el idioma". Probablemente debe pensar que decir "Alántico" por "Atlántico" y "Aletico" por "Atlético" lo vuelve más lindo. .
“El lenguaje inclusivo afea el idioma de manera
insostenible”
Desde hace años, con la masificación del movimiento
feminista, cuestiones cotidianas se enfrentaron a un proceso de revisión. El
idioma español, por ejemplo: por norma la palabra que generaliza géneros es
masculina. El lenguaje inclusivo, el tercer género de la “e”, ofrece una
salida. Aún es algo que está en disputa.
Para el director de la Real
Academia Española y presidente de la Asociación de Academias de la Lengua
Española desde el 10 de enero de 2019, el lenguaje inclusivo “afea el idioma de
manera insostenible”, según informó ABC. Santiago Muñoz Machado es jurista especializado en derecho
administrativo y constitucional, miembro de la Real Academia de Ciencias
Morales y Políticas y director del Diccionario
del español jurídico y del Diccionario
panhispánico del español jurídico.
En el ICAM realizó una ponencia sobre el lenguaje jurídico y luego, al recibir
preguntas, le consultaron por el desdoblamiento de género. Fue entonces que
Muñoz Machado explicó que “nos hemos acostumbrado” a nuevas fórmulas. “Nadie
introduce una conferencia en la actualidad, en un foro como este, sin decir
‘señores y señoras’, que es una manera de desdoblar”, aseguró.
Según su mirada, el uso del masculino genérico es
“inclusivo” y no hace falta aplicar el tercero género de la “e”. “Si realmente
alguna de esas fórmulas se repite tanto que se convierte en lenguaje ordinario
de una mayoría de los españoles tendrá éxito y se incorporará a nuestro
lenguaje ordinario, claro que sí. Todos y todas, por ejemplo, está teniendo
bastante progresión”, comentó.
“Si todos nos empeñáramos
otras, otros y ‘otres’, si todos utilizáramos padre, madre y ‘adre’, al final
esas palabras prosperarán y se incorporarán al lenguaje”, agregó después en
referencia al tercer género que tanto se usa en Argentina, pero también en
muchos países del mundo donde hablan el castellano. Sin embargo, es un debate
que no ha concluido.
Para la Doctora en Letras Karina
Galperín, hay una “sobreactuación contra el lenguaje inclusivo” que
resulta “esperable porque es una disputa entre generaciones”. En una entrevista con Infobae Cultura sostuvo que “los
lenguajes no son machistas o feministas”, sino que “expresan relaciones y
registran el mundo tal como existe”, por eso “le estamos pidiendo a la lengua
una precisión que incluya la distinción”.
donde decía lo siguiente: “No creo que importe si
estás a favor o en contra del uso cada vez más común de palabras neutras. Lo
importante es que nadie olvide que la inclusión sigue pendiente. El lenguaje
inclusivo es sobre todo un síntoma: el del malestar compartido por el hecho de
que buena parte de la población humana siga estando fuera de toda
representación”.
En diciembre del año pasado,
la RAE ya había dejado en claro cuál era su posición: “El uso de la letra ‘e’ como supuesta marca de
género inclusivo es ajeno a la morfología del español, además de innecesario,
pues el masculino gramatical (‘chicos’) ya cumple esa función como término no
marcado de la oposición de género”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario