viernes, 26 de agosto de 2016

Una encuesta para periodistas (V)

Quinto día de la encuesta para periodistas, formulada para conocer cómo se tratan los libros traducidos a la hora de reseñarlos en los medios.

Una encuesta para periodistas (V)

Rodrigo Pinto
(El Sábado, El Mercurio – Chile)

 1)¿Cuál es la proporción aproximada de textos traducidos que se comentan en el medio para el que escribe?
–La revista El Sábado, donde escribo reseñas semanales, circula con el diario El Mercurio. En mi columna la proporción actual de libros traducidos es de alrededor de 30 %, porcentaje que ha bajado considerablemente en los últimos años por decisión propia: decidí darle mayor prioridad a libros de escritores chilenos y latinoamericanos.

2) ¿Se consigna en la nota el nombre del traductor?
–No. Y creo que es un error mío.

3)  ¿Se detiene alguna vez a comentar la tarea del traductor? Si sí, ¿en qué términos?

–A veces sí, en especial en el caso de las traducciones españolas. A veces es evidente el descuido, la traducción literal, el uso de estructuras gramaticales ajenas al buen castellano; en otros casos, más irritantes, el problema es la traducción a un castellano rígido y pesado, o bien al abuso flagrante de españolismos. En ambos casos se trata de traducciones que se distribuyen en toda Iberoamérica, pero que sólo tienen plena aceptación en la península española.

Mario Jursich
(El Malpensante – Colombia)

1) ¿Cuál es la proporción aproximada de textos traducidos que se comentan en el medio para el que escribe?
–Es variable, pero puede acercarse al 50%. Predominan los libros traducidos del inglés y el francés; luego, dependiendo de las modas, el alemán y el italiano. De un tiempo acá noto que se comentan muchos libros traducidos del japonés y el húngaro, pero eso se explica sobre todo por el éxito de Murakami y Sándor Márai y, en menor medida, por el Nobel concedido a Imre Kertész. 

2) ¿Se consigna en la nota el nombre del traductor?
A veces, aunque nadie parece considerarlo una obligación. Por experiencia propia, sé que el nombre del traductor es lo que primero eliminan cuando falta espacio.

3) ¿Se detiene alguna vez a comentar la tarea del traductor? Si sí, ¿en qué términos?
Es excepcional que suceda. Suele haber, sí, comentarios como "la traducción es deficiente", pero eso a menudo sólo significa que se utiliza en demasía una variante del español (la argentina, la mexicana o la española). Los comentaristas en Colombia favorecen las traducciones con un español estándar, libre de localismos. 

Mauro Libertella
(Ñ – Argentina)

1) ¿Cuál es la proporción aproximada de textos traducidos que se comentan en el medio
–La mitad, aproximadamente. 

2) ¿Se consigna en la nota el nombre del traductor?
–Hace un tiempo se empezó a consignar en la ficha del libro que acompaña la reseña (Autor, editorial, precio, cantidad de páginas y traductor). No se hace siempre, pero la idea (o lo ideal, en este caso), sería hacerlo. En algunas ocasiones, más aisladas, el reseñista o crítico menciona al traductor o traductora en el cuerpo de la nota para hacer algún tipo de comentario sobre la calidad o el tipo de traducción. En líneas generales, los traductores que además hacen crítica en los medios son los más propensos a hacer este tipo de comentarios sobre la traducción de un libro. Y por último, en aun menor medida, a veces se hace una nota completa sobre el traductor de un libro; por ejemplo, recientemente, a Marcelo Zabaloy por su versión del Finnegans Wake.

3) ¿Se detiene alguna vez a comentar la tarea del traductor? Si sí, ¿en qué términos?
No. Muy rara vez lo hago. Me ampara el prejuicio personal de que no sabría cómo hacerlo (del mismo modo que no me "atrevo" a criticar poesía). Posiblemente tenga que revisar esa carencia.


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